El Contador
Público, como depositario de la confianza pública, "da fe" cuando
suscribe un documento que expresa opinión sobre determinados hechos económicos
pasados, presentes o futuros.
En sus
actuaciones el Contador Público debe considerar y analizar al usuario de sus
servicios como ente económico independiente, observando en todos los casos los Principios de: Integridad,
Objetividad, Independencia, Responsabilidad, Confidencialidad, Respeto y
Observancia de las disposiciones normativas y reglamentarias, Competencia y
actualización Profesional, Difusión y colaboración, Respeto entre Colegas, y
Conducta Ética intachable.
El
conocimiento y aplicación de lo normado en el Código de Ética Profesional del
Contador Público es de vital importancia en su
desempeño profesional.